¿Cómo conseguir elecciones íntegras?
“Las elecciones son la raíz indispensable de la democracia; son el mecanismo legítimo para gestionar la transferencia de poderes pacíficamente.”- Kofi Annan
Cuando se piensa en democracia, los ciudadanos generalmente la asocian con la democracia representativa, es decir, la elección mediante votaciones de quienes tendrán la atribución de representarlos en el quehacer político. Según el informe realizado por Latinobarómetro en el año 2020, la insatisfacción con la democracia ha aumentado progresivamente desde el año 2013 de 51% a un alarmante 70% en 2020 en Latinoamérica. Aumentar la confianza en las elecciones puede ser un elemento que contribuya a resolver este problema y promover elecciones íntegras.
¿Cuál es la relación entre elecciones y democracia?
Las elecciones se han convertido en un mecanismo universal y en la mayor expresión de la democracia, tanto así que desde el año 2000 hasta la actualidad, solamente en once países del mundo no se han celebrado elecciones nacionales. Al vivir en un régimen democrático se espera que existan elecciones cada cierto tiempo, que garanticen la participación de la ciudadanía en la toma de decisiones políticas. Para que los procesos electorales se perciban como legítimos, cuenten con credibilidad y aporten a la confianza en la democracia, se requiere que algunos criterios se cumplan.
¿Qué debe pasar previo a una elección?
Los procesos previos a los comicios electorales son fundamentales para unas elecciones confiables. El Estado debe garantizar que las campañas se realicen en igualdad de condiciones y la información presentada al electorado debe ser veraz y oportuna.
La difusión de noticias falsas, la falta de control en el gasto electoral, los planes de gobierno carentes de calidad , entre otros, generan un reto para fomentar un voto informado. Asegurar que el proceso previo a elecciones sea lo más igualitario posible, aporta a una jornada electoral más confiable.
El día de votación ¿Cómo se garantizan elecciones íntegras?
La Declaración Universal de Derechos Humanos y el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, define ciertas normas, principios y derechos claramente definidos que los gobiernos se comprometen a cumplir para celebrar elecciones con integridad.
El día de los comicios electorales, la ciudadanía debe sentir la seguridad y la confianza de que su voto será secreto y tomado en cuenta para la declaración de resultados. De igual manera es recomendable contar con organismos electorales (OE) profesionales y competentes, que actúen con independencia y promuevan procesos transparentes.
La prioridad para el Estado debe ser la eliminación de barreras jurídicas, administrativas, políticas, económicas y sociales ya que que dificultan la participación política universal e igualitaria. Durante las elecciones existen otros actores que se involucran para aportar a la consecución de estos fines, por ejemplo, la sociedad civil.
La sociedad civil y su rol en procesos electorales
Debido a la creciente desconfianza con procesos electorales, indicios de fraude y escándalos en los países de la región, se requiere involucrar a más actores independientes que fortalezcan los procesos de unas elecciones íntegras. Un ejemplo de esto es la participación de organizaciones internacionales en procesos de veedurías durante elecciones o el rol de la sociedad civil como veedora y observadora durante los procesos electorales, estos mecanismos son imperantes para garantizar que las jornadas se realicen de manera transparente.
La sociedad civil como veedor electoral: Caso Colombia 2022
La sociedad civil estuvo presente en la observación de los comicios presidenciales en Colombia en mayo de 2022. Se desplegó una misión con profesionales de diferentes delegaciones en los que incluyeron a Ecuador, República Dominicana, Perú, México y Argentina. Los delegados de distintas organizaciones de sociedad civil observaron de primera mano el proceso de elección de representantes para el periodo 2022- 2026. La delegación pudo hablar con funcionarios del gobierno encargados de organizar los comicios, tales como miembros del Consejo Nacional Electoral y de la Registraduría General del Estado. Así también se pudo hablar con miembros de mesas receptoras del voto y ciudadanía en general.
Observar el proceso para garantizar transparencia
La participación de organizaciones que no formen parte del aparato estatal o que tengan conflictos de interés relacionados al ganador de unas elecciones son factores que aumentan los niveles de confianza en la ciudadanía con el proceso electoral, lo que garantiza una transición política más pacífica y que respeta los valores democráticos.
En el proceso electoral colombiano de mayo de 2022 la población sentía desconfianza debido a un posible fraude, explícitamente posicionado con declaraciones de uno de los candidatos a la presidencia. Es por ello que el rol de la sociedad civil como veedor de estos procesos fue indispensable.
La fortaleza de la participación de la sociedad civil como veedor en estos procesos recae en su habilidad para sumar esfuerzos, ser reconocidos por el Estado y otros actores para emitir juicios, tener una plataforma desde la cual evidenciar posibles irregularidades o dar fe de que las cosas se hacen bien. El fin último de la sociedad civil en elecciones debe ser la democratización del espacio público, tomando un rol activo que vaya mucho más allá del sufragio.
FARO y su rol como sociedad civil en procesos electorales
FARO, desde su área de Democracia, Transparencia y Ciudadanía Activa, promueve una participación activa del electorado en varias etapas del proceso electoral. Previo a elecciones, con iniciativas como Ecuador Decide, FARO tiene como objetivo promover el voto informado. Para esto se brindan herramientas de comparación y análisis de las propuestas de campaña para que el electorado cuente con información pertinente y relevante para tomar su decisión en las urnas.
Posterior a elecciones, el compromiso de la ciudadanía no termina. La iniciativa Del Dicho al Hecho da seguimiento al cumplimiento de las propuestas de las candidaturas ganadoras. Así se evalúa la gestión de las autoridades de elección popular en su primer año de gobierno.
En esta ocasión, FARO contribuyó a su rol como una organización de la sociedad civil en el ámbito internacional al contar con una representante en procesos de observación electoral, garantizando así un trabajo mancomunado con otras OSC y fortaleciendo las capacidades de su equipo para enriquecer su trabajo.